Leyenda: Pira Ñu, Paraguay

Cuenta la leyenda que el Pira Ñu, cuyo nombre en guaraní significa “pez espíritu” o “pez fantasma”, es un ser espectral que habita en los ríos y arroyos, especialmente en las zonas más profundas y oscuras. Se le describe como un pez de gran tamaño, a menudo con escamas brillantes y ojos rojos penetrantes, aunque su forma exacta puede variar según quién cuente la historia.

Este espíritu acuático no es un pez común; se dice que es el alma de algún pescador o navegante que murió ahogado o de manera trágica en las aguas. Lleno de rencor y buscando venganza, el Pira Ñu acecha a aquellos que se aventuran en su territorio, especialmente a los pescadores que considera responsables de su destino o que son demasiado codiciosos.

La leyenda cuenta que el Pira Ñu puede manifestarse de diversas maneras. A veces, se presenta como un remolino repentino y peligroso que puede volcar embarcaciones. Otras veces, se aparece como una sombra oscura bajo el agua, asustando a los navegantes y haciendo que pierdan el rumbo. También se dice que puede atraer a sus víctimas hacia las profundidades, donde las arrastra hasta ahogarlas.

Los pescadores antiguos contaban historias de cómo sus redes se rompían misteriosamente o cómo sentían tirones inexplicables en sus líneas, atribuyéndolo a la presencia del Pira Ñu. Para evitar su ira, solían ofrecerle pequeños tributos, como tabaco o aguardiente, arrojándolos al agua antes de comenzar a pescar. También se recomendaba hablar con respeto del río y evitar la pesca excesiva en un mismo lugar.

Se creía que el Pira Ñu era especialmente peligroso durante las noches de luna llena o en los días de tormenta, cuando las aguas se agitaban y el velo entre el mundo de los vivos y los muertos se hacía más delgado. En esos momentos, era mejor evitar navegar o pescar para no perturbar al espíritu vengativo.

Así que, la próxima vez que te encuentres cerca de un río o arroyo en Paraguay, recuerda la leyenda del Pira Ñu. Ten respeto por las aguas y sus misterios, pues nunca se sabe qué espíritus pueden estar acechando en las profundidades.

Texto e imagen en colaboración con Gemini IA.